En las olimpiadas de Atenas, el deportista de Corea del Sur Moon Dae Sung, campeón olímpico de Taekwondo en la categoría de más de 80 kilos ofreció su medalla de oro a Jesucristo tras su resonante victoria.
Moon tomó control del combate final contra el retador Alexandros Nikolaidis de Grecia cuando en el primer round le conectó una patada en la cabeza que dejó al griego inconsciente durante algunos minutos.
Moon, campeón mundial de este arte marcial natural de Corea en 1999, permaneció al costado de Nikolaidis hasta que éste recuperó la conciencia, tras lo cual ambos atletas se abrazaron. Moon elevó luego el brazo de su oponente y lo acompañó a una “vuelta de la victoria” en el coliseo.
“Le ore a Dios antes de comenzar la pelea, y le pedí su bendición para que pudiera ganar si Él lo deseaba. Por tanto esta medalla de oro se la dedico a Jesucristo”, dijo Moon ante una sorprendida prensa.
El campeón coreano relató además que al momento de abrazar a su opositor le dijo que era “un verdadero campeón” y que “su pueblo lo amaba”. “También le dije que la patada que le descargué fue un accidente y que sucedió que él estaba en el camino”, dijo finalmente Moon.
Fuente: http://www.aciprensa.com/noticia.
Foto: http://news.xinhuanet.com/olympic.
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